¿Por qué nos mordemos las uñas? causas y cómo dejar este hábito.
Morderse las uñas, conocido médicamente como onicofagia, es un hábito común que afecta a personas de todas las edades. Aunque suele comenzar en la infancia o adolescencia, muchos adultos también lo mantienen, muchas veces sin darse cuenta. Pero ¿qué nos lleva a hacerlo y cómo podemos evitarlo?.
🔍 ¿Qué lo causa?
Expertos en salud mental señalan que este comportamiento suele estar relacionado con factores emocionales o psicológicos. Las principales causas incluyen:
- Estrés o ansiedad: Morderse las uñas puede actuar como una forma de liberar tensión.
- Aburrimiento o inactividad: Muchas personas lo hacen cuando están distraídas o sin nada que hacer.
- Perfeccionismo o frustración: Intentar «arreglar» imperfecciones en las uñas puede desencadenar el hábito.
- Imitación o costumbre: En algunos casos, se adquiere por observar a otros o como un hábito repetido desde la infancia.
🚫 ¿Por qué es un problema?
Aunque parezca inofensivo, este hábito puede tener consecuencias como:
- Daño a las uñas y cutículas
- Infecciones por bacterias que se introducen desde la boca o las manos
- Problemas dentales o en la mandíbula
- Afectación estética y baja autoestima
✅ ¿Cómo evitar morderse las uñas?
Los especialistas recomiendan una combinación de estrategias físicas y psicológicas:
- Identificar los desencadenantes: Tomar conciencia de cuándo y por qué te muerdes las uñas es el primer paso.
- Mantener las uñas cortas y cuidadas: Esto reduce la tentación y mejora la imagen de las manos.
- Usar esmaltes amargos o transparentes especiales: Están diseñados para desalentar el hábito al generar un sabor desagradable.
- Terapia o apoyo psicológico: En casos persistentes, puede ser útil acudir a un profesional de la salud mental.
- Sustituir el hábito: Usar pelotas antiestrés, goma de mascar o practicar técnicas de relajación puede ayudar a canalizar la ansiedad.
🧠 Un hábito con raíz emocional
Morderse las uñas no es solo una manía; muchas veces es un síntoma de algo más profundo. Reconocerlo y buscar apoyo es clave para superarlo y mejorar tanto la salud física como el bienestar emocional.