El Día de las Madres en Nicaragua: una tradición con raíces históricas y culturales.
Cada 30 de mayo, Nicaragua se viste de fiesta para honrar a una de las figuras más importantes de la sociedad: la madre. Pero, ¿cómo nació esta significativa celebración en el país?
La historia del Día de las Madres en Nicaragua se remonta al año 1940, durante la presidencia de Anastasio Somoza García. La fecha fue establecida oficialmente el 30 de mayo, en honor a la madre de su esposa, Doña Casimira Sacasa, quien coincidencialmente celebraba su cumpleaños ese día. Desde entonces, esta fecha fue institucionalizada como un día festivo dedicado exclusivamente a las madres nicaragüenses.
A diferencia de otros países que celebran esta fecha en mayo pero en distintos días —como el segundo domingo en muchas naciones—, en Nicaragua el 30 de mayo ha adquirido un carácter especial. Las escuelas, instituciones públicas y privadas, así como los medios de comunicación, organizan actividades para reconocer el amor, sacrificio y dedicación de las madres.
A lo largo de los años, esta festividad se ha convertido en una jornada de unión familiar, reflexión y gratitud. Es común ver altares, serenatas, festivales escolares y encuentros familiares en los que se honra a las madres vivas y se recuerda a las que ya partieron.
Además de ser una fecha con alto valor emocional, también representa uno de los momentos de mayor dinamismo comercial en el país, con promociones, regalos y servicios orientados a consentir a las madres.
Aunque sus raíces están ligadas a un gesto político, el Día de las Madres en Nicaragua se ha consolidado como una expresión genuina del cariño y respeto que la sociedad nicaragüense le tiene a la figura materna.